1. EQUÍPATE CORRECTAMENTE:
Antes de comenzar cualquier actividad, es necesario equiparse correctamente. Aunque el textil es importante y buscaremos ropa cómoda y transpirable, lo más relevante es un calzado acorde con nuestras necesidades. Déjate asesorar por un profesional, él te recomendará la zapatilla que más se ajuste a tu tipo de pisada, peso y kilómetros que vayas a hacer.
2. BUSCA UN GRUPO:
Actualmente han proliferado mucho los grupos que quedan para correr unos días por semana. Si tienes la posibilidad, únete a uno de ellos. Estar en un grupo te hará las sesiones más amenas, conocerás gente y te ayudará a superar esos días que no te apetece tanto salir a correr.
3. SIGUE EL PRINCIPIO DE PROGRESIÓN:
Los primeros días vas a estar muy motivado y con deseos de progresar rápidamente, es en este punto cuando debes tener la cabeza fría y seguir el lema “lento y seguro”. Los progresos en el principiante son rápidos, pero no debes caer en el error de quemarte antes de tiempo. Las primeras semanas debes terminar con buenas sensaciones y quedarte con ganas de más. Si en estas semanas no adquieres una buena base, no aguantarás las siguientes fases.
4. CORRE DE FORMA EFICIENTE:
Como en todos los aspectos de la vida, se debe buscar la fórmula: “más rendimiento con menos esfuerzo”. El correr de una forma eficiente, te facilitará realizar sesiones con mayor volumen y menos esfuerzo, por no hablar de la prevención de lesiones.
Esta eficiencia se consigue realizando ejercicios de técnica de carrera una vez por semana (podrás ver ejemplos en posteriores artículos)
5. BUSCA TU RITMO ÓPTIMO:
En estas primeras sesiones, debes buscar un ritmo que te permita ir hablando y llevar una sensación cómoda. Si quieres controlarlo por medio de la frecuencia cardiaca, debes mantenerte entre un 60-70% de tu FCMáxima (220-edad).
Si durante tu rodaje vas muy fatigado, revisa tu ritmo y prueba ir un poco más lento.
6. CONTROLA LA RESPIRACIÓN:
La respiración es un factor importantísimo y que puede condicionar mucho tus sesiones de entrenamiento. Tampoco hay que obsesionarse, simplemente controla que las respiraciones sean suaves y no muy profundas. Debes seguir un patrón que te resulte cómodo, yo uso 2 pasos para inhalar y 2 pasos para exhalar, pero tu puedes probar otras combinaciones, eso si, no olvides coger el aire por boca y nariz y echarlo por la boca.
7. DESCANSO:
De una forma cotidiana, podemos comparar el entrenamiento con una enfermedad. El cuerpo detecta algo que le altera su equilibrio y se adapta para hacerse más fuerte ante esa “amenaza”. Sin meterme en detalles de fisiología del ejercicio, puedo decirte, que las adaptaciones más importantes del entrenamiento se producen en el periodo de descanso.
Para comenzar deja un día o dos de descanso entre cada sesión de entrenamiento.
8. ALIMENTACIÓN:
Al ser principiante no tienes por que obsesionarte con la alimentación, aunque no está de más seguir unas sencillas pautas.
Aumenta tu porcentaje de hidratos antes y después de una sesión larga, come de todo pero moderadamente, pon especial atención a la hidratación y huye de ciertas dietas para deportistas que puedas encontrar en la red.